
Los refugios o cobertizos son sin duda el elemento mas sencillo que podemos instalar para dar abrigo y protección frente a la lluvia y el viento a nuestros caballos , pero también sirven como sombra en las épocas de calor. El concepto mas habitual es un habitáculo cerrado por tres caras y abierto totalmente por una de forma que permita la circulación de los caballos con toda la amplitud posible de forma que no provoque problemas de circulación especialmente cuando conviven mas de un caballo. Esta forma en U también permite que la cama este aireada y por tanto seca y además que no se acumulen los gases que producen los excrementos de los caballos.

El espacio mínimo recomendable varia según el tipo de caballo y si convive o no con mas animales, en cuyo caso el espacio mínimo se incrementa por razones de seguridad, en cualquier caso no se recomienda en ningún caso tamaños inferiores a 9 m2 por caballo.

En cuanto a la estructura es también variable, el material mas utilizado es el hierro galvanizado, por su resistencia y versatilidad . La madera es una opción, pero debemos proteger los cantos vivos para que no sean mordidos por los caballos.

En definitiva el refugio optimo que podemos construir en relación calidad, precio, seria el formado por una estructura de acero galvanizado , cerramiento con madera de pino machihembra y tratada para clase de uso desnivel 4 y una cubierta de chapa prelacada con aislamiento tipo sandwich, construida en forma de U y colocada sobre una base de hormigón. Con una superficie mínima por caballo de 9 m2.


